Cuando hablamos de calidad, rápidamente nos invade una sensación de confort, de excelencia, de algo bien hecho. Todos somos sensibles a ella. Su alteza, la "calidad". La deseamos en todos los aspectos de nuestras vidas pero a veces cuesta llegar a ella por lo exclusiva que parece que es , otras no sabemos diferenciarla bien y en ocasiones nos engañamos eligiendo la cantidad en su defecto y relevándola a un segundo plano.

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         Javier, Javi para los que le queremos bien, es también una de esas personas "de calidad". Desde su sonrisa primera, de las más sinceras que conozco y ya en el saludo, siempre percibes su perfume (nunca el mismo), pero que te acerca a lo que de verdad es importante para él, el refinamiento, el buen gusto. Lo acompañan su voz, su atenta escucha, su carcajada amplia , su abrazo.Todo es cálido en Javi, todo es de verdad. Y es ahí donde reside la verdadera calidad de las cosas, en la verdad, donde no cabe la trampa.

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         Es por eso que pensé en él para esta sección tan necesaria en los tiempos que corren, y digo corren porque la velocidad es hoy compañera y muchas veces enemiga de la calidad. Todo se ha acelerado, hoy se abren espacios que mañana cerrarán y no quedará huella, ya no se cuida el detalle como antaño, vivimos una sociedad de usar y tirar, sin apegos..., donde todo cambia constantemente, ya nada pretende durar toda la vida. Este encuentro se convertirá en una parada obligatoria, un stop necesario. Queremos plantear si tiene sentido correr tanto, si compensa. Dentro de lo que el movimiento "slow" nos dicta, un sentir mucho más allá de las cosas, apreciar la vida despacio y que tenga sentido, hacerla útil, que cualquier experiencia se convierta en un placer para los sentidos pero siempre desde la calidad, desde el lado bueno de las cosas. Hablaremos de todas las cuestiones que denotan excelencia, linaje, muestras casi perfectas, con una presencia y un sentir únicos. Todo ello enmarcado en lo que es nuestra seña, la atemporalidad de la cosas, su historia, su evolución, su lugar en el espacio, su cuidado, su mejor conservación a través del tiempo y su devoción. Su altura y su diferenciación comparándolo con lo opuesto, lo efímero, lo insuficiente y lo secundario.

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         Lo transportaremos al campo de la moda, a su historía, aprenderemos sobre tejidos, confecciones, cortes y cosidos. Diferenciaremos bien entre una prenda bien hecha de otra que no cumple con su cometido de perdurar en el tiempo, ya sólo por cariño. Nos convenceremos de que es mejor tener una buena que cien malas, que al final esa prenda que adquieres debe tener la oportunidad de ser lúcida y no acabar apretada en el armario sin ninguna otra función que engrosar tu "closet" y no ser nunca vista. No te enseñaremos a vestir pero si a hacerlo bien, con cabeza. Al final no será otra cosa que buscar el equilibrio, darle utilidad a nuestras prendas, hacerlas especiales. Y como no todos corremos la suerte de poder permitirnos ciertas "glorias", te enseñaremos a hacerte un experto en oportunidades y chollos, para que no se dañe tu bolsillo.

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         También la calidad estará presente en otras cuestiones relacionadas con la ciudad, su diseño, su arquitectura, su conservación y sus dependencias. Subrayaremos lugares únicos y excelentes,  igualmente haremos crítica sobre otros no tan acertados.

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         Porque desde Timeless sentimos la necesidad de parar en seco unos segundos, respirar hondo y poner luz de cruce para elegir el camino adecuado. ¿Te subes?

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