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Foto del escritorTIMELESS.

MANifesto | CAMISETA BÁSICA EN TODO, PARA TODO, CON TODO.

Actualizado: 6 oct


Hay una cosa que uno siempre busca y es la comodidad. No hay nada como estar cómodo. Cómodo en el trabajo, cómodo en una relación, cómodo en tu propia piel y cómodo comodísimo, con la ropa que llevas. Hay una prenda imprescindible y ultraversátil en el armario que sirve y salva de todas, que te hace sentir seguro y que vale tanto para hacer deporte como para salir de marcha. En invierno como abrigo y en verano, ella sola. No hay mucho misterio, es la camiseta de algodón básica. Lisa, estampada o con mensaje pero siempre clave, para ellos y para ellas, sobretodo ahora que las chicas se han dado cuenta que nuestras camisetas XL les sientan mejor que a tí. Blanca o negra son imprescindibles, dos básicos que no pueden faltar en tu armario, en tu maleta de viaje, allá donde vayas.

Pocas cosas hablan de tí más que una simple camiseta blanca o negra. Se adapta a todas las épocas del año porque aunque en verano sólo mirarla ya de calor, muchas noches estivales será la primera que pilles buscando un look algo más sobrio y vestido. Son súper accesibles, coleccionamos montones de ellas, remplazables, a veces ni las vemos en los estantes. Su perfecta combinación con todo tipo de prendas: pantalón de vestir, chinos o jeans, asomando bajo camisas, debajo de jerseys, con zapato clásico o zapatillas. Todo permite una camiseta básica.

Con cuello redondo, pico y cada vez más vistas escotadas en hombres, asomando bien el pecho. “Slim” o “loose” dependiendo de lo que pida tu cuerpo. Con manga larga y corta, con bolsillo, sin él , con o sin botones. Pero la que de verdad nos seduce más es la que va sola, sin nada que la distraiga, cuello redondo, longitud hasta la cintura y sin bolsillo. Dicen los que más saben que el hombre sólo necesita una camiseta blanca y nada más.¿acaso hay algo más atractivo?

Las prendas más sencillas son las que hablan por sí mismas, no hay que ponerles añadidos. Y no hay nada más sencillo que una camiseta básica.

Se van introduciendo nuevas texturas que permiten la transpiración debido a la velocidad que hoy llevamos en todo que no nos permite tiempo de pasar por casa a cambiarnos de ropa, el hecho de que cada vez más gente se desplace en bibicleta por la ciudad y que el running pueda ser el deporte que hagas de camino al trabajo. Una camiseta nunca te hará quedar mal, incluso se atreve a acompañar a trajes en red carpets y eventos sociales. Su carácter siempre rebelde, despreocupado, minimalista pero muy estiloso, desenfadado y guerrero. Icono de los años 50 y 60, a todos nos viene a la mente la fiel camiseta de James Dean bajo su chupa de cuero o la siempre camiseta ceñida de Marlon Brando.

El look que elijo para hoy es la camiseta negra, mi preferida. Me siento tan agusto con ella que ni siquiera me la quito para dormir después de salir por ahí y no la suelto en esa mañana dominguera y resacosa, de relax necesario y reflexión. Sólo necesito eso, estar cómodo, un café con un cigarro y ver pasar el día.

Pero hay algo que por encima de otras prendas tiene una camiseta y es su poder. Objeto estratégico de algunos directivos de empresas, quizá por centrar la atención en la marca, pasar desapercibido o lograr disimular la atención que causa su presencia. Este método uniformado es lo que se llama “Life hacking”.

Mark Zuckerberg, el fundador de Facebook viste siempre una camiseta o sudadera de color gris; “en realidad quiero aclarar mi vida para hacerla sencilla y así tener que tomar la menor cantidad de decisiones posibles sobre cualquier cosa excepto la forma de servir mejor a esta comunidad” “siento que no estoy haciendo mi trabajo si gasto energía en cosas tontas y frívolas sobre mi vida”, en palabras del propio Zuckerberg.

Le siguen otros como el empresario Steve Jobs y su camiseta negra de manga larga, el comediante Louis CK y sus imprescindibles camisetas negras. En ellos hay un nivel de conciencia de su propio poder, denota una despreocupación por la imagen que centre todo su atractivo en lo que dicen o hacen, fijar la atención en su cometido, envueltos en un color despreocupado, anónimo, invisible.

El negro, color fuerte, enigmático, sobrio, sofisticado y elegante, ligado a la oscuridad, a la noche, antítesis del blanco pero juntos casi siempre en todo. Color elegido habitualmente por el mundo de la cultura, el de la magía, el del luto y cada vez más, el del deporte. Firmas deportivas tan conocidas como Adidas o Nike lo incluyen entre sus colores oficiales. El Real Madrid, para sorpresa de muchos aficionados presentó años atrás a la equipación con camiseta negra luciendo un peculiar dragón en el torso, realizado por el diseñador japonés Yohji Yamamoto, representando la grandeza, la gloría y el poder.

Mi cometido en Manifesto será informaros de cómo estar cómodo en tu piel, cuidarte desde dentro afuera, encontrar un estilo de vida acorde contigo, con tu personalidad. Cuidarte desde la acción, el movimiento sin presión ni lesión y cúal es el equipamiento que deberá acompañarte en toda actividad que se precie.

​Mi punto de partida es un elemento básico que irá contigo de la mano y ese para mí es la camiseta.

Un primer outfit despreocupado, con jeans rotos , zapatillas Converse y añadiendo una cazadora vaquera desgastada. Un paseo tranquilo alrededor de casa, hoy se trata sólo de andar. Caminar es el deporte más completo que hay, sencillo, barato, no desgasta la maquina, el corazón agradece y la cabeza despeja preocupaciones . Alguna parada, una caña entre amigos en algún bar mítico como " Café Manuela" o "el Pepe Botella" y tan agusto.

Homenaje a la camiseta negra como única fuerza motora en un look masculino, pero siempre negra. Unida a un vaquero azul nos lleva tambien a los rockabilly de los años 50´s, rebeldía y carácter; con total black, elegancia y distinción. Ésta vez con bolsillo lateral en otro tejido pero igualmente negro y alargando la longitud, conjuntada con unas deportivas Le coq Sportif en azul y burdeos que le dan el toque rebelde al look aunque sean igualmente aptas para una ocasión más vestida.

Hay una cosa que cambia cualquier look que se precie y es cómo lo llevas. El mismo pantalón con las misma camiseta, esta vez en clave de manga larga, incluso las mismas zapatillas puede cambiar de rollo si por ejemplo te peinas de otra manera o si le das un aire más trabajado al asunto. De repente, eres otro. Eso es lo que mola, jugar contigo y cambiarlo todo.

Sólo una camiseta la culpable de que no quiera rendirme a otras prendas. Manifesto mi devoción a ella por valerme en todas las batallas.

Agradecimientos: Café Manuela | Café Pepe Botella | Friendly Rentals Madrid

 

CRÉDITOS. TIMELESS.

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